Verónica González
Si últimamente tu feed está lleno de delineados intensos, labios oscuros y vibes de “me arreglé sin ganas pero me veo increíble”… no estás sola. El grunge está oficialmente de regreso, y llegó más poderoso que nunca.
Inspirado por los 90s, pero con un toque 2025, el maquillaje grunge vuelve a estar en el spotlight: rebelde, sin esfuerzo, imperfecto (a propósito) y muy, muy cool.
Piensa en piel natural pero con actitud, sombras oscuras difuminadas como si no te importara (pero te importa), y labios intensos que dicen “soy el drama y me encanta”. Esta vez, la tendencia se mezcla con el glow actual y fórmulas más cómodas para lograr un balance entre lo edgy y lo usable.
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Olvídate de las líneas milimétricas. Aplica lápiz negro en la línea superior e inferior de las pestañas y difumina con el dedo. El secreto está en que no sea perfecto, sino intencionalmente messy. Bonus tip: aplica un poco de sombra gris encima para fijarlo y hacerlo más dramático.
No necesitas una paleta con 12 tonos. Con un solo tono marrón oscuro, gris o morado profundo puedes lograr un smokey look. Aplica en todo el párpado móvil y difumina los bordes hacia la cuenca. El truco está en mantener el centro del párpado más cargado para un efecto tridimensional.
Borgoña, ciruela, vino, casi negro… es hora de desempolvar esos tonos que te intimidan pero te transforman. Puedes llevarlos mate para un statement total o glossy si quieres suavizar el look. ¿No quieres comprometerte del todo? Hazlo difuminado con el dedo para ese efecto mordido muy de los 90s.
Aunque el grunge original amaba la piel mate, la versión actual permite un toque de iluminador para mantener la piel con vida. Opta por una base ligera, corrige lo necesario y añade un glow estratégico en los pómulos. La clave está en no sobrecargarla.
No es obligatorio, pero unas uñas negras, vino o verde bosque completan el mood. Y si no eres fan de los tonos oscuros, las uñas cortas al natural también son grunge-approved.
Delineador jumbo negro: para trazos fuertes y fáciles de difuminar.
Paleta de tonos fríos y terrosos: marrones, grises, verdes apagados.
Labial en vino o plum: que puedas aplicar con o sin brocha.
Spray fijador de acabado glow: para sellar sin matar el brillo.
Rubor malva o nude frío: más neutral, más rebelde.
Este regreso grunge es la excusa perfecta para sacar tu lado rebelde y expresarte sin filtros. Lo mejor es que no hay reglas: es messy, es bold, es real. Así que atrévete a llevarlo como quieras. Con delineado corrido, labios intensos o solo una sombra ahumada express.
You do you, siempre.
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